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Brassaï

por Gustavo Bravo

Brassaï fue uno de los primeros fotógrafos en lanzarse a las calles parisinas en los años 30 para practicar lo que más tarde se denominaría fotografía urbana, un movimiento del que también participaron Cartier-Bresson, Robert Doisneu o André Kertész haciendo uso de las nuevas cámaras portátiles.

Pero, a diferencia de ellos, Brassaï  optó por fotografiar de noche y eso aún no era compatible con las cámaras ligeras colgadas al cuello (aunque más adelante sí las utilizaría).

Él hacía sus fotos con su cámara de placas y no se separaba de su trípode.

Brassaï empezó a hacer fotos a finales de los años 20 (entre sus 25 y 30 años), siendo muy prolífico en la década de los 30 y convirtiéndose rápidamente en uno de los miembros más destacados dentro del conjunto de fotógrafos europeos y americanos cuyo trabajo entre las dos guerras mundiales redefinió la identidad de la fotografía y enriqueció su potencial como expresión artística.

Estudiante de Arte, imaginaba las escenas previamente cuidando mucho la composición y el juego de la luz sobre el negro, dando lugar a escenas muy cinematográficas que cautivaron a los franceses y a los fotógrafos que vendrían después.

Aunque su obra más conocida sea su fotografía urbana nocturna de la capital francesa, en la que vivió a partir de sus 25 años, también trabajó para diversas revistas como fotógrafo comercial y dedicó buena parte de su vida a fotografiar la vida cultura francesa, sus principales artistas y a documentar otras disciplinas artísticas, como las esculturas de Picasso o los grafitis grabados a principio de siglo en las paredes de las calles parisinas.

Se dice que vivió obsesionado con trascender como artista y que probó prácticamente todas las disciplinas posibles hasta dar con la fotografía como medio para sobrevivir y pasar a la historia.

Biografía

Aunque es conocido como Brassaï, por el lugar de su nacimiento, Brassó (Transilvania), su nombre de pila era Gyula Halász.

Nació el 9 de septiembre de 1899 en esta localidad, que entonces pertenecía a Hungría.

En 1918, a sus 19 años, tras el colapso del imperio austro-húngaro y el nacimiento de la República Soviética Húngara, se mudó a Budapest.

Allí se inscribió en la escuela de Bellas Artes. Le interesaban mucho las artes visuales tradicionales y la literatura.

Sólo unos meses después, en 1919, con 20 años, se enroló en el ejército rojo de su país, como telefonista militar, para hacer frente a la alianza de las fuerzas checas, serbias, francesas y rumanas, que se oponían a la recién creada república.

Pero fueron derrotados por el ejército rumano y le encarcelaron durante varias semanas.

Él no quería convertirse en ciudadano de un país enemigo, por lo que abandonó Budapest y emigró a Berlín. Corría el año 1920.

En Berlín, en 1920, empezó a trabajar en un taller privado, pero pronto solicitó el ingreso en la Escuela de Artes y Oficios de Berlín y fue aceptado por su gran talento para dibujar, que pronto le abriría las puertas de la Academia de Bellas Artes de Berlín, mientras su estilo pasaba poco a poco del impresionismo a la nueva objetividad alemana.

Se mudó a París en 1924, con 25 años, queriendo encontrar su propia voz creativa, como pintor.

Allí se incorporó a la comunidad de expatriados húngaros, momento que adoptó su apodo: Gyula Halász sería a partir de ahora Brassaï.

Allí se ganó la vida con esporádicos trabajos periodísticos que en ocasiones ilustraba con caricaturas pero que por lo general implicaban aportar fotografías, al principio realizadas por otros, pero enseguida las suyas propias.

Sus primeras fotos eran para ilustrar sus propios reportajes, pero pronto empezó a fotografiar todas las facetas de la vida parisina, sobre todo de la noche, en los bajos fondos.

Tenía un interés especial hacia los mundos nocturnos de la diversión popular, el crimen y la prostitución.

Brassaï solía decir «no invento nada, lo imagino todo», que es una paráfrasis de la expresión utilizada por el biógrafo George D. Painter para describir el relato de la vida de Proust en En busca del tiempo perdido: «Aunque no inventó nada, lo alteró todo».

Para un hombre que trabajaba con un trípode y que escenificaba sus fotografías con anterioridad, lo importante no era captar un momento fugaz de la vida en la calle, sino recrear por el medio fotográfico una escena vista o imaginada.

Así, sus primeras fotografías no reflejaban el París real, sino que respondían a la idea de la ciudad que tenían en mente los lectores europeos que compraban la prensa en la que él escribía y donde publicaba sus primeras fotos.

El éxito le llegó en 1932, con su libro París de noche

En 1932, a sus 33 años, publicó el libro Paris de nuit (París de noche), con su visión sobre el París de los intelectuales y la alta sociedad.

En ese libro queda más que claro que sus fotos ya no eran parte de un reportaje gráfico, sino que para él la fotografía era un medio de expresión.

‘París de noche’ ofrece una visión de la ciudad -de los intelectuales y de la alta sociedad, junto a otros aspectos más atrevidos, que nunca ha sido igualada.

Para conseguirlo, utilizó una cámara Voigtlander Bergheil, fotografiando con la luz disponible y cronometrando las exposiciones fumando un cigarrillo: si la luz era buena, un Gauloise, en condiciones más oscuras, un Boyard (una marca barata popular entre los militares), que tardaba más en consumirse.

El increíble éxito de este libro -pese a que no incluye muchas de sus mejores fotos urbanas, que se harían o publicarían con posterioridad- y la repercusión de las fotos que publicaba en la revista Minotaure (del precursor del surrealismo André Breton) le abrieron la puerta grande del panorama artístico parisino.

Vista desde el Pont Royal hacia el Pont Solférino, c. 1933 (Brassai)

En 1933 ya era una de las grandes figuras artísticas de París.

Gracias a ello conoció a Picasso. Se hicieron buenos amigos y Picasso decidió que fotografiara todas sus esculturas: lo hizo en imágenes interpretativas en lugar de meramente documentales.

Su amistad duró muchos años más.

Fruto de esa amistad, nació treinta años después el libro ‘Conversaciones con Picasso‘, editado en 1964.

Un año después de conocer a Picasso, en 1934, empezó a trabajar para la agencia Rapho.

Y en 1937, con 38 años, ya publicaba en la revista Harper´s Bazaar.

Y algunas de sus fotografías se incluyeron en la exposición Fotografía 1839-1937 del MoMA.

Hizo cine, poesía y escultura, pero sólo fue reconocido como fotógrafo

Pero la fotografía no era su única pasión ni su único medio de ganarse la vida. También se dedicó a la producción cinematográfica, la poesía y la escultura.

Sin embargo, a pesar de todas estas actividades, solo la fotografía le proporcionó el reconocimiento que ansiaba desde joven.

En 1937 algunas de sus fotografías se incluyeron en la exposición Fotografía 1839-1937 del MoMA.

En 1957 Brassaï fue galardonado con la medalla de oro de la Bienal de Venecia.

Y el MoMa expuso un monográfico sobre su obra ‘Grafiti’ en 1956.

En las décadas de 1960-70 se organizaron grandes exposiciones de su obra en París, Nueva York y Londres y en 1978, pocos años después de recibir la medalla de Legión de Honor, fue galardonado en Francia con el Gran Premio Nacional de Fotografía.

Durante los últimos diez años de su vida trabajó en el ensayo Proust en el poder de la Fotografía, que fue editado en 1997.

Gyula Halász, Brassaï, murió el 8 de julio de 1984, a sus 85 años, en Èze (Alpes-Maritimes), al sur de Francia.

Su cuerpo descansa en el cementerio de Montparnasse de París.

Sus fotos regresan a España 25 años después, este año 2018

Un cuatro de siglo después de su última exposición en España, sus fotos podrán verse a partir del 20 de febrero de 2018 en Barcelona, en la Fundación Mapfre.

Es la primera exposición retrospectiva de Brassaï organizada desde el año 2000 (Centro Pompidou) y la primera que tiene lugar en España desde 1993.

El 31 de mayo de 2018 se trasladará a Madrid, a la sala Fundación MAPFRE Recoletos (hasta el 2 de septiembre de 2018) y, a continuación, podrá verse en el San Francisco Museum of Modern Art (SFMoMA) del 17 de noviembre de 2018 al 17 de febrero de 2019.

Libros de Brassaï

· Paris de Nuit (Francés)

· Brassaï: For the Love of Paris (Inglés)

· Brassaï: Le flâneur nocturne (Francés)

· Brassai: An Illustrated Biography (Inglés)

· Brassaï: Graffiti (inglés)