Curso de Fotografía Digital
Tipos de lentes y objetivos en función de su distancia focal
- Escrito por Gustavo Bravo
- Última actualización en enero de 2024
- Foto: JEOSM
- Bibliografía
Los objetivos o lentes fotográficas son un elemento fundamental debido al gran protagonismo que tienen en el resultado final de la fotografía.
Aprender a diferenciarlos y a utilizarlos correctamente puede marcar la diferencia. No es lo mismo estar condicionado por tu objetivo, que conocerlo y dominarlo para contrarrestar sus defectos y maximizar sus virtudes.
Hay muchas formas de clasificar y diferenciar los objetivos, pero en este caso lo haremos por su distancia focal.
1 - ¿Qué es la distancia focal
La distancia focal se mide en milímetros y es el espacio que dista entre el punto focal y el sensor cuando el objetivo enfoca a infinito.
Un concepto de física óptica nada relevante en el día a día de tus fotos, más que para saber que es una distancia real y que está marcada con números bien grandes en tu objetivo.
La distancia focal es importante porque determina el ángulo de visión de un objetivo. Lo que a su vez determina en la práctica su uso.
En función de ese ángulo de visión, vamos a dividir los objetivos en tres grupos:
Angulares
6-35mm
Son los objetivos con las distancias focales más cortas pero el mayor ángulo de visión.
En general, se considera angular cualquier objetivo entre los 6 y los 35 mm.
Estándar
50mm
Se llaman estándar o normales todos los objetivos que rondan los 50 mm de distancia focal.
Se denominan normales por su extendida comercialización antes de existir los objetivos de zoom.
Teleobjetivos
75-600mm
Los teleobjetivos sirven para aislar el sujeto y acercarnos a los motivos que fotografiamos.
Cualquier lente con una distancia mayor de 75 mm se considera un teleobjetivo.
2 - ¿Qué son los angulares y para qué sirven?
Los objetivos angulares deben su nombre a su gran ángulo de visión. Abarcan desde los 180º hasta los 120º, según su distancia focal.
Lo consiguen gracias a lentes curvas que pueden deformar los motivos si no se utilizan correctamente.
Son los objetivos con las distancias focales más cortas y, debido a este extremo, se suelen dividir en tres subgrupos:
6-18mm: Ultrangulares
Son los objetivos con mayor ángulo de visión del mercado. Pueden alcanzar los 180 grados de esquina a esquina del sensor y se utilizan normalmente para fotografía de Interiores, Paisaje y Aquitectura. Hay que diferenciar entre los angulares rectilíneos y los ojo de pez.
20-28mm: Gran Angulares
Los de gran angular son menos extremos y más fáciles de utilizar, aunque tienen menos ángulo de visión y, por tanto, habrá motivos que pueden no entrar por completo en el plano. Se utilizan para Paisaje o Arquitectura fundamentalmente.
28-35mm: Angulares
Los objetivos angulares ofrecen un ángulo de visión moderado aunque mayor al del ojo humano. Suelen utilizarse en Fotoperiodismo, fotografía de calle y fotografía de Viajes. También pueden ser muy interesantes para Retratos en los que se desee contextualizar al sujeto.
2.1 - ¿En qué se diferencian los ultra angulares rectilíneos de los objetivos ojo de pez?
Dentro de los objetivos ultra angulares conviene diferenciar dos tipos de lentes muy diferentes porque, aunque ambas tienen un gran ángulo de visión, lo consiguen con esquemas ópticos diferentes que producen imágenes muy distintas.
Ultra angulares rectilíneos
Foto: G. Bravo
Son objetivos más caros, grandes y pesados en el caso de ser luminosos. A cambio, ofrecen un resultado más ‘real’ gracias a que no distorsionan las líneas verticales de la fotografía (si se utilizan bien).
Su uso suele ser más ‘serio’ o profesional y está reservado para situaciones en las que el ángulo de visión es imprescindible: espacios cerrados, grandes edificios o Astrofotografía (fotografía nocturna y de estrellas).
Objetivos ojo de pez
Foto: G. Bravo
Son objetivos muy compactos, ligeros y en principio, menos costosos, que ofrecen imágenes con una deformación muy característica que suele tener demasiado protagonismo para según qué usos fotográficos. Su efecto se diluye en ausencia de líneas rectas artificiales, lo que hace su uso muy interesantes en fotografía de Naturaleza Submarina.
También se utilizan en cámaras de acción, por su diseño compacto, su gran ángulo de visión y su gran profundidad de campo, lo que permite poder grabar sin ver lo que se graba.
3- ¿Por qué un 50mm se considera un estándar?
Antes de que se inventaran los objetivos de zoom, las cámaras fotográficas solían comercializarse con un 50mm, posiblemente por tratarse de un número muy redondo pero sobre todo porque, al parecer, era barato y sencillo de fabricar.
El volumen y el éxito con el que se comercializó fue tan alto que logró la denominación de estándar por este motivo.
Por otro lado, es muy frecuente o está muy extendido el decir que son lentes con un ángulo de visión similar al del ojo humano, aunque esto no es muy exacto. Mucho se ha escrito sobre este asunto, pero lo cierto es que la visión humana cuenta con dos lentes simultáneas mientras que las cámaras solo tienen una, por lo que no son visiones comparables.
Otra razón, quizá más demostrable para ser considerados ‘normales’, se debe a que muestran un encuadre a la distancia ‘real’ a la que nosotros la observamos: esto quiere decir que no acercan ni alejan los motivos, tal y como sí hacen los teleobjetivos y los angulares respectivamente.
Algo en lo que que sí hay más consenso es en la polivalencia de los objetivos de 50mm. Aún tienen suficiente ángulo de visión para dar un buen contexto pero también aíslan lo suficiente para conseguir buenos retratos. Por esta razón, ha sido la distancia focal preferida por muchos fotógrafos de reportaje durante décadas.
Son fáciles de encontrar a buen precio
Sirven para casi todas las disciplinas fotográficas
No acercan ni alejan los motivos o sujetos
4- ¿Qué son los teleobjetivos y para qué sirven?
‘Tele’ proviene del griego antiguo y significa ‘lejos’. Los teleobjetivos son las lentes con las distancias focales más largas y sirven para fotografiar desde la distancia.
Según su ‘calibre’, pueden llegar a tener ángulos de visión muy reducidos, lo que complica mucho su uso.
Si son luminosos, pueden ser tan caros y pesados que sólo estén al alcance de los verdaderos profesionales.
Cualquier objetivo por encima de los 60 mm se considera teleobjetivo, porque aumenta el tamaño de los sujetos con respecto a nuestra vista.
Otra característica interesante y común a todos los teleobjetivos es el efecto de superposición de los planos. Los teleobjetivos no sólo acercan al motivo principal, sino también al fondo, lo que crea una sensación de que los planos están mucho más cerca de lo que lo están en realidad. Se suele decir que los teleobjetivos ‘comprimen’ los planos y este efecto es mayor cuanto mayor es la distancia focal.
Al cubrir una cantidad de distancias focales tan amplia, se les suele clasificar en tres grupos distintos:
70-135mm: telebjetivos cortos
Cualquier objetivo entre los 70 y los 135 mm es considerado por muchos un teleobjetivo corto.
Este rango de distancias focales son también las preferidas por los fotógrafos de Retrato. Tanto, que también son conocidos como los objetivos ‘retrateros’.
150-300mm: teleobjetivos normales
Los teleobjetivos como tal suelen empezar en los 150 mm hasta los 300 mm. Son la herramienta preferida de los fotógrafos de Deportes, Fauna o Acción.
Gracias a ellos, pueden captar detalles en situaciones en las que no es posible acercarse.
400mm o más: super teleobjetivos
Cualquier objetivo de más de 400 mm se considera un súper teleobjetivo. Tienen la misma función que los teleobjetivos normales pero mucho más alcance. Esto suele traducirse en un mayor tamaño, peso y coste. Su uso se reduce a fotografía de Fauna Salvaje, Aves, deportes de alta competición y Astrofotografía.
5 - El ángulo de visión real que ofrece cada objetivo depende del tamaño del sensor
La relación de distancias focales y ángulos de visión antes explicada es la que se conoce como estándar de 35 mm. Es decir, la relación entre los objetivos y su ángulo de visión en las cámaras que utilizan películas de negativo de 35mm (también conocida como película de 135).
Esta relación hoy día sólo es válida si contamos con una cámara digital que tenga un sensor del mismo tamaño. El sistema de 35 mm digital conocido como ‘Full Frame’ o ‘formato completo’.
Sin embargo, la mayoría de cámaras digitales no tiene un sensor tan grande. Es posible que tu cámara tampoco.
Si es así, para saber el ángulo de visión que tienen tus objetivos tendrás que calcular algo que se conoce como ‘factor recorte’, que intentaremos explicar a continuación. No se trata de un cálculo complicado, pero no es tan sencillo entender el porqué de esta necesidad las primeras veces que se intenta.
Descubre el ‘factor recorte’ de tu cámara según su sistema
Si quieres saber qué angulo de visión tienen tus objetivos y para qué sirven, en función de la relación que hemos explicado anteriormente, simplemente tienes que averigüar cuál es el tamaño del sensor de tu cámara.
Lo más probable es que se trate de una cámara de lentes intercambiables, de las cuales existen cuatro sistemas imperantes. Los expondremos de menor a mayor tamaño de sensor:
Micro 4/3
No es el sistema de lentes intercambiables más pequeño que existe, pero sí el más popular. Olympus y Panasonic son los principales fabricantes de este sistema y su factor recorte es de 1:2.
Es decir, debes multiplicar la distancia focal de tus objetivos x 2 para saber qué angulo de visión manejas realmente. Por ejemplo: un objetivo de 25 mm es equivalente a un 50 mm de Full Frame, mientras que un 50 mm funcionaría como un 100 mm.
APS-C
Es sin duda el sistema más popular hasta la fecha. Popularizado principalmente por Nikon (DX), Canon (EF-S) y Fujifilm, aunque también Sony o Pentax utilizan sensores de este tamaño. El factor recorte es de 1:1,5 por lo que, para calcular el ángulo de visión real en relación a una cámara Full Frame, hay que multiplicar x1,5.
Es decir que, en este sistema, un objetivo de 35 mm será equivalente a un 5 0mm. Por otro lado, un 50 mm se comportaría como un 75 mm.
Full Frame
Este sistema es totalmente equivalente a la película de 135 porque el sensor tiene el mismo tamaño: 35 mm de ancho por 24 mm de alto. Por tanto, no es necesario calcular nada.
Los objetivos guardan una relación exacta de ángulo de visión con respeto a lo expuesto arriba. Un 50mm funciona realmente como un 50mm.
Formato medio
Este sistema es el más grande que se comercializa y está reservado a profesionales. Al ser más grande que el sistema de referencia, en este caso en lugar de multiplicar, se exige dividir.
Así, un objetivo de 50 mm funciona como un objetivo angular de 35 mm y un teleobjetivo de 75 mm funciona como un estándar de 50 mm.
6 - Otro factor clave: la luminosidad del objetivo
La distancia focal determina el uso general de un objetivo pero hay otro factor muy importante que también condiciona el uso que se le puede dar a una lente: su luminosidad.
La luminosidad de un objetivo es la capacidad que tiene para dejar pasar la luz a través de él.
Esto depende del ancho de su diámetro, como si de una tubería se tratara. Cuanto más grande, más fluye.
Se considera que un objetivo es luminoso cuando su diafragma base es de F2.8 o menos.
Este factor no sólo es determinante en el tamaño y el peso, sino también en el precio.
La versión luminosa de un objetivo que no lo es puede ser muchísimo más costosa, por lo que normalmente queda relegada a un uso profesional que justifique el gasto y la necesidad.
Los objetivos luminosos permiten hacer fotografías en bajas condiciones de luz sin necesidad de bajar la velocidad de obturación ni de subir la ISO.
Además, son los objetivos que producen mayores desenfoques, por lo que son especialmente apreciados por los retratistas.
7 - ¿Qué diferencia un objetivo con zoom de un objetivo fijo?
Los objetivos de zoom se inventaron para evitar la necesidad de tener que cambiar de distancia focal en situaciones de estrés.
Anteriormente, era imprescindible llevar al menos dos cámaras con dos objetivos diferentes para no perder la fotografía mientras se intercambiaban.
Los objetivos con zoom son aquellos que tienen varias distancias focales, lo que facilita el trabajo en multitud de aplicaciones fotográficas y da mayor comodidad en la fotografía doméstica.
Los objetivos fijos, por contra, son aquellos que sólo cuentan con una única distancia focal. También se conocen como objetivos de focal fija.
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