El fotógrafo Miguel Trillo expone su ‘Juego Urbano’ en Vitoria del 7 de octubre al 20 de noviembre

El fotógrafo Miguel Trillo expone su ‘Juego Urbano’ en Vitoria del 7 de octubre al 20 de noviembre

FotoGasteiz / FotoKalea.- Este viernes 7 de octubre de 2022 se inaugura en la Sala Amárica de Vitoria Gasteiz la exposición ‘Un juego urbano’ del fotógrafo gaditano Miguel Trillo.

Un punki mira a la cámara desaante desde una calle de Madrid. Un tipo con atuendo de samurái electrónico blande su espada en Seúl. Una chica muestra sus mil trenzas en Ciudad del Cabo. Aceptan y retuercen las reglas del juego que propone la ciudad, esa invitación a mirar y ser mirado en la que radica la libertad urbana que alimenta la fotografía de Miguel Trillo.

La calle ha sido desde siempre el espacio de la mirada que busca la maravilla y la extrañeza. Pero en nuestros tiempos, la inspiración no llega desde la experiencia directa sino desde el espacio mediático: igual que la televisión enseñó a los ingleses la trasgresión del punk, el manga mostró un mundo de fantasía a una nueva generación que decidió no solo observar sino convertirse en los personajes
de las historias que antes leían. Las redes sociales permitieron conectarse con el underground
global sin salir de la habitación y rompieron el tiempo y el espacio: los estilos a copiar llegan desde las megalópolis orientales, pero también desde las periferias urbanas de Colombia y los barrios multiculturales de las viejas ciudades europeas, del mismo modo que la inspiración llega por igual desde la ciencia cción y la música que desde el rescate de estéticas olvidadas.

Miguel Trillo entendió muy pronto que los jóvenes expresan su libertad lanzándose a las calles. Ellos
quieren ser mirados, proclamar su autonomía y su desafío mientras celebran su identidad.

Si otros fotógrafos se presentan como cazadores furtivos, en las fotos de Trillo los jóvenes se ofrecen al fotógrafo mirándole a los ojos y nos invitan a participar de un juego que se remonta a los orígenes de los trazados urbanos: ese entretenimiento tan sencillo y tan ecaz que consiste en llegarse a la plaza pública y dejarse sorprender por la fauna humana, para alimentar después juicios de valor, conversaciones o imitaciones. Un juego que Trillo comenzó a documentar en la explosión de las noches del Madrid de los primeros años de la democracia y la Movida y que ha seguido retratando a lo largo y ancho del mundo según avanzaban las décadas. Una coreografía de miradas que el fotógrafo ordena a modo de director de escena.
Héctor Fouce

Miguel Trillo

Nació en Jimena de la Frontera (Cádiz) en 1953. Licenciado en Imagen y en Lingüística Hispánica por la Universidad Complutense de Madrid. Desde los años 70 ha retratado a jóvenes en un entorno musical (conciertos de rock, fiestas en discotecas). En los 80 en Madrid convierte a los personajes no famosos de la Movida en su objetivo primordial (exposición Pop Purrí en la galería Ovidio -1982- y en la sala Amadís -1983- y edición anónima de seis números del fanzine Rockocó -1980 a 1984-). La década la terminó Trillo reflejando un relevo generacional en dos trabajos publicados en la revista de creación Sur Exprés: Los nuevos pijos (1988) y Madrid hip hop (1988).

Al inicio de los 90 realiza para el dominical del diario El País un retrato de la juventud española en pequeñas capitales de provincia. Dicha obra la expone en la galería Moriarty (1992), de Madrid, con el título Souvenirs, editando como catálogo tiras de postales turísticas. En 1993 transforma la galería El Manantial, de Barcelona, en una tienda de souvenirs con sus fotos reproducidas en objetos turísticos. Desde 1994 vive en Barcelona, donde ha desarrollado la serie Geografía Moderna, un viaje por fronteras lingüísticas o territoriales de la Península Ibérica. Con los retratos de estos jóvenes ha editado sellos de correos (revista El Europeo –1997-, galería H2o, de Barcelona –1999 y 2004-). Su última serie acabada lleva por título Habaneras (expuesta en el Círculo de BBAA de Madrid dentro de PhotoEspaña 05).

En la actualidad trabaja en dos proyectos: Zoom, jóvenes inmigrantes -en conciertos y discotecas- reproducidos en tarjetas telefónicas; y Gigasiápolis, actitudes de la cultura juvenil surgida en las megaciudades del continente asiático.

En 2009 se le organizó una importante retrospectiva en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC) de Sevilla y en la sala Canal de Isabel II de Madrid, comisariada por José Lebrero, actual director del Museo Picasso de Málaga. Dicha muestra recibió el Premio Villa de Madrid a la mejor exposición fotográfica del año.

El Museo Reina Sofía desde 2011 ha incluido en la exposición permanente De la Revuelta a la Posmodernidad (1962-1982) sus fanzines y fotos de principios de los 80, que forman parte de la colección del MNCARS. En 2014 estuvo presente en la exhibición La herencia inmaterial, dentro de la colección del MACBA de Barcelona.

Su obra, entre el documento, el concepto y la pasión, se encuentra igualmente en importantes colecciones privadas españolas.

El fotógrafo Miguel Trillo retrató a diferentes generaciones y tribus urbanas desde los años 80: los locales, la salida de los conciertos, las fiestas de barrio y en definitiva la calle, desde Malasaña a Alcorcón, Teruel, Barcelona o Badajoz.

A principios de los años ochenta, Miguel Trillo realizó el fanzineRockocó‘, una publicación underground que retrataba las distintas tribus urbanas de Madrid y que se ha convertido en objeto de culto.

A mitad de la década compuso ‘Callejones y avenidas’, una publicación inédita que muestra, en palabras de Trillo, «retratos tranquilos de noches inquietas».

Y lo reunió todo ello en ‘La primera Movida’, un libro que recoge las maquetas y fotografías originales, con las que Miguel Trillo realiza un intento de representación de una sociedad que ha evolucionado desde la humana necesidad de pertenencia al grupo.

Punks, tecnos, modernos y siniestros; rockers y teddys; heavys y rockeros; hiphoperos y raperos. Retratos pensados, buscados y solicitados a sus protagonistas, que se dejaban fotografiar por el autor a la salida de los conciertos. Un documento a pie de calle de la juventud de una época y de sus múltiples estéticas, influenciadas por movimientos de la contracultura: desde el punk de finales de los 70 a la música electrónica de los 90. Jóvenes marcados por un espíritu crítico e independiente. El público como protagonista y la calle como escenario.

* Otras obras de Miguel Trillo